EE.UU.- ( AGENCIALAVOZ.ORG ) El cardenal estadounidense William Levada, ardiente defensor del papa Benedicto XVI ante los escándalos de pedofilia en la Iglesia, organizó en los 90 el traslado de un cura que había agredido sexualmente a menores, sin avisar a los parroquianos, informó el sábado una fuente judicial.
En un largo testimonio que realizó bajo juramento en enero de 2006 y cuya transcripción fue proporcionada a la AFP por una abogada de las víctimas de curas pedófilos en Oregón (oeste de EEUU), el jefe de la Iglesia Católica estadounidense cuenta como decidió trasladar a ese cura, luego de que éste haya seguido una terapia, en la época en que él mismo era arzobispo de Portland, o sea entre 1986 y 1995.
"Los abusos se remontaban a 20 años atrás (...), los terapeutas afirmaban que ya no sería más peligroso para nadie y que sería más prudente darle un nuevo puesto, que el tomar un nuevo puesto en condiciones mínimamente estresantes le ayudaría'', explicaba el cardenal Levada acerca de hechos ocurridos a mediados de los años 90.
Interrogado sobre si había informado a los parroquianos sobre el pasado del sacerdote -sobre contactos sexuales con adolescentes en los años 70- el cardenal había contestado que no.
"Tomé la decisión que me parecía más sabia, dándole todos los detalles al párroco (...) y exigiendo que se reúna con él semanalmente para vigilarlo'', precisó el cardenal, que calificó su propia actitud de "responsable'' ya que, estima, tomó "una decisión ineludible''.
Para él, informar a los feligreses sobre el pasado del cura "hubiera podido tener consecuencias y perjudicar el ministerio'' del sacerdote.