SAN SALVADOR.- ( AGENCIALAVOZ.ORG )Tras ser capturados por mantener de rehenes a una treintena de fieles de una iglesia evangélica en Guazapa, San Salvador, un hombre y su hijo fueron enviados a prisión provisional por portación ilegal de armas de guerra, ocupación ilegal de edificio y privación de libertad.
Fueron los fiscales de Apopa los que acusaron a José Mercedes Miranda, de 50 años de edad, ante el Juzgado Especializado de Instrucción de San Salvador.
Debido a que el otro acusado tiene 17 años de edad será acusado ante un Tribunal de Menores de San Salvador.
La madrugada del 31 de julio pasado las víctimas fueron amenazadas por los dos imputados que irrumpieron en la iglesia del cantón Santa Bárbara portando fusiles de asalto M-16 y machetes.
Miranda dijo a los periodistas tras su detención que había tomado la iglesia para protestar por el trato que reciben los presos en los penales del país.
Adujo que una hija está en prisión.