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BRASILIA.- ( AGENCIALAVOZ.ORG )La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, defendió su política de alianzas con una gama ancha de partidos para poder gobernar con mayoría en el Congreso en el discurso que pronunció hoy al dar posesión a su nuevo ministro de Pesca, el senador pro-familia y pastor evangélico Marcelo Crivella.
Crivella, obispo de la iglesia evangélica Universal del Reino de Dios y dirigente del conservador Partido Republicano Brasileño (PRB), sustituyó en el Gabinete al diputado Luiz Sergio Nóbrega, correligionario de Rousseff en el izquierdista Partido de los Trabajadores (PT).
La jefe de Estado admitió que el nombramiento de Crivella representa el regreso del PRB a la coalición de partidos que apoya a su Gobierno y de la que forman parte desde el Partido Comunista do Brasil (PCdoB) hasta el mayoritario y conservador Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB).
Rousseff recordó que los últimos mandatarios brasileños, incluyendo su padrino político, Luiz Inácio Lula da Silva, también gobernaron apoyados por amplias coaliciones partidarias.
"Mi Gobierno no puede ser diferente. Este es un país muy complejo, múltiplo y democrático. Por eso, la constitución de alianzas políticas es la esencia para que Brasil sea administrado, para que Brasil sea gobernado de forma democrática y, al mismo tiempo, para que el Gobierno represente los intereses de la nación", afirmó.
El nombramiento de Crivella provocó algunas críticas del PT, que se resiste a seguir abriendo espacio en el Gabinete para los otros partidos, y fue interpretada como una estrategia para recuperar apoyo entre los evangélicos de cara a las elecciones municipales de octubre próximo.
Rousseff no pudo ocultar sus lágrimas al agradecer al ministro saliente.
"Luiz Sergio, usted fue y es un amigo que comprende la naturaleza de un Gobierno de coalición, así como las decisiones que la política muchas veces termina imponiéndonos en nombre de los intereses del país", aseguró.
Nóbrega aseguró que reasumirá su mandato en la Cámara de Diputados para seguir apoyando al Gobierno pese a haber sido sustituido como ministro.
"En la búsqueda de una coalición, muchas veces es necesario sustituir a personas que nos gustan y cuyo trabajo nos gusta. Por eso continúo en la Cámara, en donde la presidenta puede contar conmigo en cualquier situación", afirmó Nóbrega en declaraciones a periodistas al final de la ceremonia.
Crivella, que fue criticado por asumir un cargo como el Ministerio de Pesca del que no tiene ningún conocimiento, admitió en su discurso que "no es un especialista ni sabe colocar la carnada en el anzuelo".
"Pero colocar la carnada en el anzuelo se aprende rápido, pensar en los otros es que es difícil", dijo.
En los catorce meses que Rousseff lleva en el poder ha aceptado la renuncia o destituido por presunta corrupción a siete ministros y el año pasado también perdió por públicas diferencias con el Gobierno al entonces titular de Defensa, Nelson Jobim.
Este año ha aceptado las dimisiones de los ministros de Educación, Fernando Haddad, y de Políticas para las Mujeres, Iriny Lopes, quienes abandonaron el Gobierno pues pretenden ser candidatos a alcalde en las elecciones municipales de octubre.
