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Duan Huilai dice que éstas imágenes captadas con su cámara casera prueban el mover de Dios en China: “Es primera vez que ven éstas imágenes de cristianos en las villas alabando a Dios abiertamente”.
Duan dio a CBN News acceso exclusive a horas de video y cientos de fotos tomadas en una decena de lugares en toda China. Ellas muestran algo en común: hombres y mujeres de todas las edades tocados por el poder de Dios: “Donde quiera que voy veo gente hambrienta por Dios y Él está ahí”.
Evangelismo en zonas rurales
Duan y su esposa son evangelistas a tiempo complete. Desde el 2003 han cruzado el interior de la China compartiendo el evangelio de Jesucristo.
Lin Aimin, Evangelista China dice: “Dios nos llamó a enfocarnos en las áreas rurales donde la vida es difícil”.
Difícil, aunque simple en muchas formas. Duan mostró a CBN News fotos de cómo la gente es bautizada en áreas rurales tras aceptar a Cristo en sus vidas: “A veces los bautizo en un río. A veces son bautizados en la parte trasera de un vehículo pickup. Un par de veces he bautizado en la ducha. A menudo debemos improvisar”.
Fue en el interior de la China que el cristianismo comenzó hace décadas. La mayoría de los cristianos rurales son mujeres que se reúnen en las llamadas casas-iglesia.
“Los hombres se han ido a las ciudades a buscar trabajos, así que la mayoría de quienes van a estos servicios son mujeres mayores”, agrega Huilai.
Cristianismo con mayor crecimiento
Compartir el evangelio en China aún es prohibido. Reuniones cristianas así son ilegales pues no son aprobadas por el gobierno.
“Fui arrestado aquí cantidad de veces”. “El gobierno no permite a gente que vive en una ciudad, viajar a otra ciudad. Somos cuidadosos de las regulaciones”, dice Hulai.
Pese a las restricciones, los observadores dicen que lo que ocurre espiritualmente en el país es algo notable. Este hombre a quien llamaremos Peter, ha trabajado con iglesias subterráneas chinas por décadas.
“Aún hay masas de convertidos cada día en el interior, es muy motivador. Muchos campesinos en muchos lugares están viniendo a Cristo en cantidades y las iglesias están madurando y yendo más allá del simple evangelismo y alcanzando a grupos minoritarios y a grupos sin alcanzar”.
Es un clamor de los oscuros días de la revolución cultural. Fenggang Yang dirige el centro de religión y sociedad China en la Universidad de Purdue: “En esa época, todas las iglesias, templos y mezquitas fueron cerradas y no se permitían servicios religiosos públicos”.
Cristianos en China
Datos del gobierno chino y sondeos internacionales reportan que millones de chinos acuden a religiones como el cristianismo, budismo, taoísmo e Islam. Pero el cristianismo está experimentando el mayor crecimiento.
“Si el ritmo de crecimiento se mantiene, creo que es posible que en los próximos 30 ó 40 años el número de cristianos en China alcance un número muy alto quizás similar a Estados Unidos o Brasil”, agrega Yang.
Duan dice que la predicación del evangelio en el interior usualmente es seguida por milagros y sanidades: “Gente que no podía caminar, comienzan a hacerlo, los ciegos ven, he visto a un hombre levantarse de la muerte. Las sanidades y milagros que vemos mientras viajamos son sorprendentes”.
El mismo Duan es un milagro andante. En los noventas, él y su esposa vivían en Hungría, dirigiendo una exitosa compañía: “Estábamos haciendo mucho dinero y viviendo la buena vida. Pero no conocía al Señor. Pronto supe que necesitaba más que éxito material y entregué mi vida al Señor”.
Seis meses después de entregar su vida a jesús, el pastor Duan fue atacado por miembros de la mafia china en Hungría. Él nos muestra las cicatrices de cuchillo en su espalda, brazos y estómago que, según dice, les sirven para recordar la protección de dios.
“Fui acuchillado más de cincuenta veces y casi pierdo la vida pero sé que Dios me salvó por una razón”.
Y ésta es. La oportunidad de alcanzar las partes remotas de esta gran nación con un mensaje de esperanza y salvación en Jesucristo.
“A menudo predico en iglesias permitidas por el gobierno así como en iglesias subterráneas y en ambas hemos presenciado el poderoso mover de Dios. Nuestra oración es que un día todos en nuestro país escuchen de Jesús” dice Huilai.
