Escrito Por Dr James Dobson
( AGENCIALAVOZ ) Una investigación ha mostrado que los padres pueden aumentar la capacidad intelectual de sus hijos. Esta conclusión fue sacada del renombrado Proyecto Preescolar de la Universidad de Harvard. Un equipo de investigadores, dirigido por el doctor Burton White, estudió niños pequeños de entre ocho y dieciocho meses de edad durante un período de diez años, con el fin de descubrir cuáles son las experiencias de los primeros años de la vida que contribuyen al desarrollo de un ser humano saludable e inteligente. Los resultados de este importante estudio se resumen a continuación:
1. Cada vez es más claro que las capacidades del ser humano tienen su origen en un período crítico de desarrollo entre los ocho y dieciocho meses de edad. Las experiencias del niño durante estos breves meses influyen más en sus futuras facultades intelectuales que durante cualquier otro tiempo ya sea antes o después.
2. El factor ambiental más importante en la vida del niño, es su madre. "Ella es la clave", dice el doctor White, y ejerce más influencia en las experiencias de su hijo que ninguna otra persona o circunstancia.
3. La cantidad de lenguaje "en vivo" dirigido al niño (lo cual no se debe confundir con la televisión, la radio, o las conversaciones que no lo incluyen a él) es vital para su desarrollo fundamental lingüístico, intelectual y social. Los investigadores llegaron a la siguiente conclusión: "El proporcionarle al niño, de 12 a 15 meses de edad, una vida rica en actividad social es lo mejor que se puede hacer para garantizar que llegue a tener una inteligencia bien desarrollada".
4. Los niños a quienes se les permite el libre acceso a todas las áreas de la casa, progresan con mucha más rapidez que aquellos cuyos movimientos son limitados.
5. El núcleo familiar es el mejor sistema educativo. Para producir niños capaces y sanos, hay que fortalecer a las familias y mejorar la interacción que ocurre dentro de las mismas.
6. Los mejores padres fueron los que sobresalieron en tres funciones claves:
(a) Eran excelentes diseñadores y organizadores del ambiente de sus hijos.
(b) Permitieron que en ocasiones sus hijos les interrumpieran brevemente, por períodos de 30 segundos, durante los cuales intercambiaban consejos, consuelo, información y entusiasmo.
(c) Aplicaron la disciplina de manera estricta, al mismo tiempo que mostraron un gran afecto hacia sus hijos.
De vez en cuando, recibimos información que necesitamos archivarla para referencia futura. Estos hallazgos del Proyecto Preescolar de la Universidad de Harvard son importantes. No los olvide. Creo que son la clave para criar niños saludables.
1. Cada vez es más claro que las capacidades del ser humano tienen su origen en un período crítico de desarrollo entre los ocho y dieciocho meses de edad. Las experiencias del niño durante estos breves meses influyen más en sus futuras facultades intelectuales que durante cualquier otro tiempo ya sea antes o después.
2. El factor ambiental más importante en la vida del niño, es su madre. "Ella es la clave", dice el doctor White, y ejerce más influencia en las experiencias de su hijo que ninguna otra persona o circunstancia.
3. La cantidad de lenguaje "en vivo" dirigido al niño (lo cual no se debe confundir con la televisión, la radio, o las conversaciones que no lo incluyen a él) es vital para su desarrollo fundamental lingüístico, intelectual y social. Los investigadores llegaron a la siguiente conclusión: "El proporcionarle al niño, de 12 a 15 meses de edad, una vida rica en actividad social es lo mejor que se puede hacer para garantizar que llegue a tener una inteligencia bien desarrollada".
4. Los niños a quienes se les permite el libre acceso a todas las áreas de la casa, progresan con mucha más rapidez que aquellos cuyos movimientos son limitados.
5. El núcleo familiar es el mejor sistema educativo. Para producir niños capaces y sanos, hay que fortalecer a las familias y mejorar la interacción que ocurre dentro de las mismas.
6. Los mejores padres fueron los que sobresalieron en tres funciones claves:
(a) Eran excelentes diseñadores y organizadores del ambiente de sus hijos.
(b) Permitieron que en ocasiones sus hijos les interrumpieran brevemente, por períodos de 30 segundos, durante los cuales intercambiaban consejos, consuelo, información y entusiasmo.
(c) Aplicaron la disciplina de manera estricta, al mismo tiempo que mostraron un gran afecto hacia sus hijos.
De vez en cuando, recibimos información que necesitamos archivarla para referencia futura. Estos hallazgos del Proyecto Preescolar de la Universidad de Harvard son importantes. No los olvide. Creo que son la clave para criar niños saludables.