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QUITO-. ( AGENCIALAVOZ.COM ) Ecuador entró de lleno en la campaña para el referendo del 28 de septiembre sobre el proyecto de Constitución que impulsa el presidente izquierdista Rafael Correa, quien enfrenta por primera vez la oposición Pro vida y la jerarquía católica en su camino hacia la reelección.
Los detractores y partidarios del proyecto tendrán 45 días para hacer campaña pública y en los medios en torno a la Carta Magna que elaboró y aprobó una Asamblea de mayoría oficialista, según la autoridad.
La iniciativa de 444 artículos le permitiría a Correa buscar la reelección -con lo que su período podría extenderse hasta 2013- y dota de herramientas al Estado para planificar y regular la economía entre muchas otras reformas.
El mandatario estima que la Constitución sepultará al neoliberalismo y sentará las bases del socialismo del siglo XXI, la corriente que con otros matices defiende su aliado venezolano Hugo Chávez.
Pero incluso antes de que empezara la contienda, el gobierno libra una intensa y fatigante guerra de interpretaciones con sus adversarios, que han sacado a relucir los errores y contradicciones del texto para promover el voto en contra en el referendo. La chispa la encendió la cúpula de Pro vida y eclesiástica que objetó la propuesta por considerar que deja abierta la puerta al aborto, el matrimonio entre homosexuales y la concentración de poder en el presidente.
Correa llamó "mentirosos" a los de Pro vida y obispos y texto en mano ha tratado de desvirtuarlos. Lo cierto es que más allá de la posición política de la Iglesia, "la Carta Política da pie a una interpretación muy amplia porque se ocupa de lo divino y lo humano", dijo Simón Pachano, analista de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso).
El artículo más cuestionado por la Iglesia reza de manera textual: "El Estado reconocerá y garantizará la vida, incluido el cuidado y protección desde la concepción", según el proyecto difundido por la Asamblea.
Para el arzobispo Antonio Arregui, presidente de la Conferencia Episcopal de Ecuador, el párrafo es ambiguo y contradictorio con otro artículo que "reconoce a toda persona el poder de decidir cuándo y cuántos hijos tener, asumiendo así la aceptación del aborto".
La derecha y empresarios de oposición respaldan los cuestionamientos y acusan además a Correa de hacer una Constitución a su medida para extender su mandato, concentrar el poder y estatizar la economía.
Mientras, el ex gobernante Lucio Gutiérrez, enconado adversario del gobierno, advirtió varias veces sobre un posible fraude el 28 de septiembre, justificando sus sospechas en algunos sondeos que avizoran al momento una derrota del gobierno.
Para que la Constitución entre en vigor deberá ser aprobada por la mitad más uno de los sufragios. El ejecutivo asegura que cuenta con 65% de las intenciones a favor, pero encuestadoras privadas creen que el apoyo alcanza 47% contra 51% de votos en contra, nulos y blancos.
