República Dominicana.- ( AGENCIALAVOZ.COM ) El pastor metodista Gabriel Israel Rosario, destituido tras la difusión de informaciones aún no confirmadas de que había abusado sexualmente de al menos dos menores de edad, denunció a través de sus abogados un supuesto plan para dañar su imagen y anunció que presentará cargos contra los responsables.
“Hasta la fecha y según certificación expedida por el licenciado Andrés Ramírez Nova, procurador fiscal de Bonao, no existe denuncia ni querella contra el pastor”, indicaron en un comunicado Ángela Arias, Arquímedes Reyes, Nelson Pimentel y Roberto Rosario, quienes se identificaron como abogados del religioso.
Al denunciar un supuesto plan para dañar a su cliente, los abogados anunciaron que presentarán cargos “con los responsables de iniciar la embestida contra el pastor Rosario”.
Según los abogados, la supuesta campaña obedece “intereses particulares”, además de que personas a quienes no identifican “persiguen hacerle daño a él (Rosario) y su familia con fines inconfesables.
Rosario, quien llevaba 20 años al frente de la iglesia Metodista Libre de Bonao, fue destituido el pasado 1 de junio, luego de que el joven Domingo Tavárez, de 25 años, dijo al periódico Listín Diario que el pastor lo había violado sexualmente cuando él tenía 16 años.
“¿Es creíble que una persona que fue violada a los 16 años, ahora a los 25 años lo revele y no actúe en justicia contra el supuesto violador?”, cuestionaron los abogados en su comunicado.
Además de Tavárez, Richard Gómez Polanco denunció en la prensa que Rosario también abusó de él cuando era menor de edad.
Tras las denuncias de supuesta pedofilia, el obispo Samuel Peña, de la Iglesia Metodista, destituyó a Rosario y ordenó establecer seguridad en la iglesia para evitar la extracción de bienes.
Según la prensa de Bonao, Rosario también fue suspendido de sus labores pastorales por denuncias de desvío de fondos e incluso un intento fallido de sustraer la planta eléctrica de la iglesia que dirigía.
Los abogados de Rosario aseguraron que el 10 de junio Rosario remitió a la Fiscalía de Bonao un documento en el que manifestaba su disposición a someterse a cualquier investigación.