ESPAÑA-. ( AGENCIALAVOZ.ORG )Han sido dos noches en los calabozos de la Comisaría de Huelva y tres horas en las celdas de la Audiencia Provincial, en las mismas donde hace tan sólo unos meses esperó el asesino de su hija, Santiago del Valle, el veredicto de culpabilidad del jurado.
Juan José Cortés aún no logra entender el motivo por el que ha permanecido "durante más días" en los calabozos que quien mató a su pequeña Mari Luz. "Sé que forma parte de los trámites, pero es muy duro estar encerrado en los mismos calabozos donde estuvo el asesino de mi hija y sin hacer nada", asegura en declaraciones a EL MUNDO.es.
A lo largo de todas esas horas, Cortés reconoce que ha tenido tiempo de reflexionar sobre su vida y darle vueltas a todo lo ocurrido en la madrugada del pasado miércoles. "Yo no he dado ningún tropiezo ni he cometido un delito en mi vida", insiste una y otra vez molesto de haya quien ponga en duda su inocencia después de casi cuatro años "luchando por mejorar la Justicia en este país".
Juan José Cortés no quiere hablar de la noche de los tiros, es como si así pudiese borrar un episodio de su vida que espera nunca más se repita. "Se va a quitar la denuncia y hay que dejar que trabaje la Justicia. Quien haya cometido el delito que pague y punto, pero yo no he cometido ninguno", reitera tras insistir en que confía en una Justicia por la que lleva "una lucha incansable".
A la espera de responder ante el juez por los cargos de amenazas, lesiones y daños que se le imputan, ahora parece que ha llegado el momento de contestar a quienes le han condenado ya desde la política. "No pueden reclamar mi dimisión si no soy culpable de nada", lamenta, al tiempo que amenaza con llevar a los tribunales a cargos públicos que, como el secretario de Comunicación del PSOE-A y parlamentario andaluz, Miguel Ángel Vázquez; el coordinador regional de IU, Diego Valderas, y el diputado socialista por Granada Manuel Pezzi, han "manchado" su imagen.
"Qué sentido tiene que Valderas hable de mí si no me conoce y ni siquiera ha hablado conmigo personalmente. Es una estrategia política que le va a salir caro porque el perjurio está penado y a lo mejor el imputado en este sentido va a ser él", señala Cortés antes de recordarle al dirigente izquierdista que su partido mantiene imputados "aún participando de la vida pública".
En este sentido, el padre de Mari Luz asevera que si hubiese cometido un delito "ya, automáticamente en ese preciso momento, hubiera presentado mi dimisión y dejado el cargo porque no tengo la cara tan dura de estar ahí como otros pueden hacerlo".
No obstante, Cortés está convencido de que todos los "ataques" que ha sufrido en los últimos días tienen por origen los "nervios" que hay en el PSOE e IU por su incorporación al proyecto del PP. "Cuando arrastro muchísima gente que confía en mí, seguramente la otra parte me vea como un peligro político", apunta antes de calificar de "inadmisible en política" las declaraciones "destructivas".
Por último, Cortés no logra a comprender que dirigentes del PSOE, partido en el que militó durante algún tiempo, realicen declaraciones contra su persona "sin demostrar nada", sobre todo porque el propio candidato socialista a la Presidencia, Alfredo Pérez Rubalcaba, "me dijo en la presentación de mi libro que no le importaría ficharme y yo sigo siendo el mismo que se sentó con él, con Zapatero, Rajoy y hasta con el presidente del Consejo General del Poder Judicial".