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SAN JOSE.- ( AGENCIALAVOZ.ORG )El legislador no estaba, como lo acostumbra, en su púlpito de pastor, más bien asistía como invitado en la comisión legislativa que estaba a punto de dictaminar un proyecto de ley que procura dar derechos a parejas del mismo sexo.
Con ello, retrasó el debate y frenó cualquier posibilidad de que los congresistas integrantes de ese órgano tomaran alguna decisión.
Eso ocurrió en la sesión del 25 de octubre, según consta en el acta, y así ganó el tiempo suficiente para presentar mociones que mantienen varada la iniciativa.
Consultado, Orozco reconoció que recurrió a los pasajes bíblicos porque ese día lo tomaron “desprevenido” y estuvo a punto de dictaminarse el plan.
“Después mi participación ha sido a base de derecho internacional, Constitución Política y a mi vivencia con educador, como una persona sobria, que nunca ha tenido vicios, que todas las cosas las hago en orden y lo que le conviene a mi país lo defiendo”, afirmó Orozco.
Sin embargo, en otras reuniones una asesora del legislador del Partido Renovación Costarricense oró en el espacio asignado al público, mientras dentro de la sala la Comisión de Derechos Humanos intentaba avanzar con la iniciativa.
Por ello, varios congresistas critican la posición de Orozco.
“El dictamen del proyecto está enfrentando un bloqueo evidente del diputado Orozco; no llega a discutir el proyecto sino a leer la Biblia. Claramente, promueve el rechazo, la discriminación, el odio hacia personas por el solo hecho que tienen una orientación sexual distinta”, denunció José María Villalta, diputado del Frente Amplio.
Un criterio similar sostiene la presidenta de esa comisión, Carmen Muñoz, del Partido Acción Ciudadana (PAC).
“Él llega con la única tarea de que este proyecto no avance. En general, le haría un llamado a Justo que, desde el amor que pregona como cristiano, valore más lo que dice y sea más respetuoso y amoroso con esta población”, opinó Muñoz.
El proyecto que adversa Justo Orozco es el de sociedades de convivencia, que procura darles a las parejas gais los mismos derechos que tienen las heterosexuales.
Por ejemplo, como el seguro social, herencias, visita conyugal y crédito compartido para vivienda, entre otros.
Además, la conformación de las “sociedades de convivencia” se inscribiría en el Registro Civil.
Fe en Dios. Justo Orozco insiste en que aprobar esos derechos sería “legalizar el pecado”.
El congresista opina que no solo los evangélicos están en contra de darles derechos a los homosexuales, sino también los católicos.
“Somos más del 95% que estamos en contra de esas prácticas extrañas que vienen a dañar la salud del país”, aseveró Orozco.
No obstante, Carmen Muñoz asegura que muchas veces Orozco fomenta el odio en su alocución.
“Él pretende endosárselo (males sociales) a esta población para justificar que este grupo está al mismo nivel de asesinos, ladrones y todo tipo de antisociales”, indicó.
Abelardo Araya, del Movimiento Diversidad, lamentó la posición.
“Ya es hora de que todas las personas tengamos los mismos derechos. Hay que hacer la lucha visible contra la discriminación”, dijo.
Por ahora, Orozco afirmó que si lo vuelven a tomar desprevenido volverá a leer la Biblia.
