COSTA RICA.-(AGENCIALAVOZ) Ciprofam Internacional emitió una nota informativa que organizaciones cooperantes internacionales están enviando grandes sumas de dinero a Costa Rica para legalizar el “matrimonio homosexual y buscan en convertir el primer país de Centro América.
Ciprofam denuncio que el
“Movimiento Diversidad está tratando de conseguir 165.000 firmas
(el 5% del padrón electoral) para presentar una iniciativa legislativa popular
para la legalización del matrimonio igualitario. Los activistas pro derechos de
los homosexuales consideran que tiene
los votos suficiente para ser aprobado una vez logrado la iniciativa
legislativa
Por su parte El Dr. José Linares Cerón presidente del movimiento internacional
pro-familia dijo en una emisora en los Ángeles,
“La lucha es inminente,
la movilización de los profamilias en la calles y la presión a los
legisladores será determinante”. También añadió: “ Invito a unirse a la marcha del 10 agosto por la familia, la oración y el activismo de
los ciudadanos será similar al pueblo de Dios cuando rodeo los muros de Jericó”.
Finalizo.
En Costa Rica se aprobó las uniones entre personas del mismo sexo “por error”dentro de una Ley para los jóvenes en la que se incluían referencias al matrimonio. El texto, redactado por las alas más a la izquierda del Parlamento, es conscientemente ambiguo y deja abierta a la interpretación de los jueces la posibilidad de validar las uniones civiles homosexuales.
La Ley fue aprobada por la presidenta de Costa Rica, Laura Chinchilla, católica y conservadora, sin permitir el debate político que sí se estaba produciendo en los medios de comunicación y ha posibilitado que unas nueve parejas de gays y lesbianas hayan presentado los documentos en los juzgados correspondientes.
“Ella ha cambiado”, opina Marco Castillo, portavoz del Movimiento Diversidad, la principal asociación costarricense en defensa de las uniones homosexuales. El activista es optimista respecto a la respuesta que estas pioneras parejas pueden obtener gracias a la ambigüedad de la norma. Además, el Movimiento Diversidad está tratando de conseguir 165.000 firmas (el 5% del padrón electoral) para presentar una iniciativa legislativa popular para la legalización del matrimonio
En Costa Rica se aprobó las uniones entre personas del mismo sexo “por error”dentro de una Ley para los jóvenes en la que se incluían referencias al matrimonio. El texto, redactado por las alas más a la izquierda del Parlamento, es conscientemente ambiguo y deja abierta a la interpretación de los jueces la posibilidad de validar las uniones civiles homosexuales.
La Ley fue aprobada por la presidenta de Costa Rica, Laura Chinchilla, católica y conservadora, sin permitir el debate político que sí se estaba produciendo en los medios de comunicación y ha posibilitado que unas nueve parejas de gays y lesbianas hayan presentado los documentos en los juzgados correspondientes.
“Ella ha cambiado”, opina Marco Castillo, portavoz del Movimiento Diversidad, la principal asociación costarricense en defensa de las uniones homosexuales. El activista es optimista respecto a la respuesta que estas pioneras parejas pueden obtener gracias a la ambigüedad de la norma. Además, el Movimiento Diversidad está tratando de conseguir 165.000 firmas (el 5% del padrón electoral) para presentar una iniciativa legislativa popular para la legalización del matrimonio