PERU.-(AGENCIALAVOZ) En un debate televisivo, el jurista Fernán Altuve demandó al congresista peruano Carlos Bruce que no camufle su propuesta legislativa como “uniones civiles” de personas homosexuales, cuando es en verdad un “matrimonio que no le dicen matrimonio”.
Bruce tituló a su propuesta legislativa, ingresada a trámite el 12 de septiembre, “Proyecto de Ley que establece la Unión Civil No Matrimonial para Personas del Mismo Sexo”.
El proyecto legislativo ha generado división dentro del propio lobby gay en Perú, que lo han calificado como una “ley guetto” y “hecho a medida de los homofóbicos”.
Durante el debate en Canal N, Bruce admitió que su proyecto de ley, a pesar de que no contempla la adopción, busca que se establezca que las uniones homosexuales “son uniones familiares, son nuevos tipos de familia”.
Para que eventualmente se reconozca el mal llamado “matrimonio” gay, Bruce advirtió que “podemos perfectamente evolucionar el Código Civil”, que actualmente en su artículo 234 solo contempla como matrimonio a la unión de un varón y una mujer.
Fernán Altuve explicó a Bruce que de acuerdo a las leyes peruanas, “la familia como es concebida es a partir del matrimonio y además tiene un elemento sustancial, que es la procreación”.
“Lo que pasa es que quieren pasar un matrimonio que no le dicen matrimonio. Llámenle matrimonio y vamos a ver cuál es la opinión de toda la población peruana”.
Bruce intentó reducir el debate al plano religioso, asegurando que “de acuerdo a personas que tienen una formación religiosa muy específica dicen que no, porque la ley natural dicen que son hombre y mujer, y el hombre y mujer procrean”.
Sin embargo, Altuve le explicó que este no es un tema religioso, sino algo comprendido en “la ley civil”.
Consultado por el tema de las herencias de las personas homosexuales, Altuve explicó que, al igual que las personas heterosexuales, “puedes dejarle el 50 por ciento (a tu pareja) porque no tienes descendientes. Al 50 por ciento son los ascendientes”.
“Hay centenares de personas en el Perú que no son homosexuales y que tienen problemas con sus padres y también tienen que dejarles el 50 por ciento”, dijo, descartando el argumento de alguna discriminación patrimonial hacia las personas homosexuales.
“Ese no es un problema de homosexuales o heterosexuales, es un problema de cualquier joven que tiene problemas con sus padres”, señaló.
Fernán Altuve demandó a Carlos Bruce que “si esto no es un tema estrictamente patrimonial, yo creo que le deberían decir matrimonio, porque esto es un matrimonio que no se llama matrimonio”.
En Perú, una encuesta reciente ha revelado que el 76 por ciento de los peruanos se opone a las uniones homosexuales, y que no votaría por candidatos que las promuevan.
Ante este panorama, Altuve subrayó que “no se puede imponer a una sociedad criterios con los que esa sociedad no comulga”.
Carlos Bruce argumentó que de acuerdo al artículo 2 de la Constitución de Perú, que contempla los derechos de la persona, como el de la vida, pero que no reconoce el término orientación sexual, “no puede ser que parejas heterosexuales tengan más derechos que las homosexuales”.
Sin embargo, Altuve le replicó que con ese argumento, Bruce consideraba inconstitucional al Código Civil, “porque habla de matrimonio de hombre y mujer”.
“Son dos fines del matrimonio, hacer vida en común y procrear, eso es el matrimonio. Y tú estás creando un matrimonio que solo tiene un fin, hacer vida en común, porque no puedes procrear”, dijo.
“No camufles, pues, no camufles”, criticó.
Carlos Bruce comparó luego las uniones homosexuales con “una pareja que no ha procreado porque no quiere procrear, como una madre soltera con su hija o una abuela que cría a su nieta. Son familia”.
A lo que Altuve contestó que tanto la madre soltera con su hija como la abuela con su nieta son familia, “pero no son matrimonio”.
“El problema que veo acá es un problema: confunden el matrimonio, confunden la familia y confunden el derecho”, lamentó Altuve.
“A situaciones diferentes, derechos diferentes”, indicó el jurista, descartando una vez más que las personas homosexuales sean discriminadas al no poder tener un “matrimonio”.