Toda esta indignación está provocada por la mal llamada Ley de Defensa de la Primera Enmienda, conocida como #FADA (First Amendment Defense Act), que extiende la cobertura legal en todo el estado a individuos y corporaciones permitiendo la discriminación de personas homosexuales, bisexuales y transexuales, así como a las parejas del mismo sexo, en base a creencias religiosas, una medida que se extiende por lo tanto a cualquier persona con cualquier otra creencias religiosa que no sea la suya, parejas de diferente sexo, separadas o divorciadas, y hasta madres solteras.
Brian Green, encargado de las relaciones con el cliente de la compañía, ha manifestado que ya no se sienten cómodos pagando sus impuestos en Georgia, donde lo van a perseguir por su principios cristianos y donde tienen afincada su sede, aunque operan también desde otras ciudades estadounidenses como Dallas, San José & Santa Clara y Nueva York, teniendo una gran proyección internacional que les lleva hasta Montreal, Amsterdam, Singapur, Hong Kong y Melbourne.