Israel -. ( AGENCIALAVOZ.COM ) Por siglos, arqueólogos y cazadores de tesoros han planteado teorías sobre la verdadera existencia de las minas del rey, especialmente tras la publicación del libro escrito por H. Rider Haggard y que las describía como un escondite de oro y diamantes.
Ahora arqueólogos de EE.UU. y de Jordania dicen haber hallado un gran centro de extracción de cobre al sur del país asiático, el cual habría dado origen a la leyenda de las minas del monarca. Según los expertos de la U. de California en San Diego (UCSD), el punto cúlmine de la producción industrial del sitio de Khirbat en-Nahas -cuyo nombre significa “ruinas de cobre”- data del siglo X a.C. lo que concuerda fuertemente con el período de gobierno que se le asigna a Salomón y su padre David.
La región es mencionada en el Antiguo Testamento como el Reino de Edom, que en la era de Salomón se había convertido en un estado vasallo que pagaba tributo a Jerusalén. “Esta investigación representa una confluencia entre los datos arqueológicos y científicos y lo que cuenta la Biblia”, indicó Thomas Levy, director del Laboratorio de Arqueología Levantina de la UCSD.
La región es mencionada en el Antiguo Testamento como el Reino de Edom, que en la era de Salomón se había convertido en un estado vasallo que pagaba tributo a Jerusalén. “Esta investigación representa una confluencia entre los datos arqueológicos y científicos y lo que cuenta la Biblia”, indicó Thomas Levy, director del Laboratorio de Arqueología Levantina de la UCSD.
Khirbat en-Nahas abarca cerca de 100 edificaciones antiguas que incluyen una fortaleza y se encuentra en una gran área cubierta por desechos mineros que abarcan casi 10 hectáreas y que incluso se pueden ver en las imágenes satelitales que incorpora el programa Google Earth.
Según los expertos encabezados por Levy, los depósitos mineros abundan. Además, hay una capa de desechos mineros de seis metros que evidencia procesos industriales de extracción. El mineral permitió a Salomón tener un suministro constante para fabricar armas, herramientas y otros productos comerciables.
Los futuros estudios en Khirbat en-Nahas se centrarán trabajar junto a una sociedad de conservación de la naturaleza para que se preserve el entorno y así lograr que sea declarado Patrimonio de la Humanidad.