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EE.UU-. ( AGENCIALAVOZ ) Las investigaciones con respecto a la adicción al trabajo son cada vez más a nivel mundial.
Enterate cuáles son, según especialistas, las causas, sus síntomas y cómo debe tratarse. Es innegable la aceleración que se produjo en el ritmo de trabajo, por el avance tecnológico y su consecuente reducción de los tiempos “necesarios”. Sin embargo, los especialistas en el tema están preocupados por las repercusiones que tiene un estilo de vida en donde si el hombre no trabaja por demás, no se siente realizado.
Las empresas incentivan al empleado a tener este tipo de conductas premiando al más trabajador. En un artículo publicado en “The New York Times”, el periodista económico Phyllis Korkki, explica las causas y consecuencias de un modo de vida que tiene en vilo a los científicos.“El adicto al trabajo es adicto a la actividad incesante”, explica al “New York…” Diane Fassel, autora del libro Trabajando hasta morir y directora de Newmeasures, una consultora que se especializa en la confección de sondeos que buscan encontrar el nivel de satisfacción de los empleados en las empresas. ¿Cómo hacer para saber si uno es adicto al trabajo?Según Fassel, los principales síntomas se pueden percibir en el cuerpo. “Se ha demostrado que el estrés que acompaña al trabajo en exceso conduce al abuso de sustancias, desórdenes del sueño, ansiedad y, luego, a problemas físicos como enfermedades cardíacas”, comenta la directora de Newmeasures. En contraposición, Gayle Porter, profesora de Administración en la Escuela de Negocios de la Universidad de Rutgers (USA), considera que la señal más fuerte para darse cuenta de la adicción es externa al individuo. “Si varias personas cercanas a usted sienten que las descuida por tazones de trabajo, definitivamente debe tomar muy en serio preocupaciones”.¿Es la adicción al trabajo una enfermedad?
Los síntomas de la adicción suelen ser: abuso de sustancias, desórdenes del sueño, ansiedad y enfermedades cardíacas.El debate sobre si se puede equiparar esta adicción con otras, más habladas en la sociedad, como el alcoholismo, todavía no llegó a su final. Sin embargo, el psicoterapeuta y autor del libro Encadenado al escritorio, asegura: “Cada vez son más los profesionales de la salud mental que consideran a la adicción al trabajo como una condición que puede provocar daño mental y físico”.Además, el psicólogo asegura que uno de los mayores problemas de esta situación “es que la gente es elogiada y recompensada por trabajar en exceso”. Es cierto que quien marca la diferencia en una empresa, suele ser aquel que más duro trabaja, pero no debe incentivarse por parte de la compañía el exceso laboral.¿Existen personalidades más propensas a padecer de esta adicción?Sí, definitivamente. Según Porter la mayoría de los adictos tienen tendencias “perfeccionistas, controladoras o una combinación de ambas cosas”. Sin embargo, no todas las personas que trabajan mucho pueden padecer de la adicción.
Recomiendan tratar el tema con especialistas y pedir un cambio de área en el trabajo.“En algunos momentos de nuestras vidas, muchos de nosotros hemos tenido que trabajar muchas horas, pero tenemos un regulador interno que nos dice cuándo parar. El adicto al trabajo, en cambio, se siente privado de felicidad sin esa actividad constante”, explica Fassel.¿Cómo hacer para curarse?Según Porter, es difícil que el adicto se curse sin ayuda externa. “Puede necesitar ayuda profesional o el apoyo activo de familiares y amigos”, explica y agrega que si no se produce un cambio en el lugar del trabajo, las exigencias y el ritmo de trabajo no bajarán. “Quizás deba pedir un cambio de responsabilidades o una transferencia dentro de la compañía”, finaliza Porter.
Los síntomas de la adicción suelen ser: abuso de sustancias, desórdenes del sueño, ansiedad y enfermedades cardíacas.El debate sobre si se puede equiparar esta adicción con otras, más habladas en la sociedad, como el alcoholismo, todavía no llegó a su final. Sin embargo, el psicoterapeuta y autor del libro Encadenado al escritorio, asegura: “Cada vez son más los profesionales de la salud mental que consideran a la adicción al trabajo como una condición que puede provocar daño mental y físico”.Además, el psicólogo asegura que uno de los mayores problemas de esta situación “es que la gente es elogiada y recompensada por trabajar en exceso”. Es cierto que quien marca la diferencia en una empresa, suele ser aquel que más duro trabaja, pero no debe incentivarse por parte de la compañía el exceso laboral.¿Existen personalidades más propensas a padecer de esta adicción?Sí, definitivamente. Según Porter la mayoría de los adictos tienen tendencias “perfeccionistas, controladoras o una combinación de ambas cosas”. Sin embargo, no todas las personas que trabajan mucho pueden padecer de la adicción.
Recomiendan tratar el tema con especialistas y pedir un cambio de área en el trabajo.“En algunos momentos de nuestras vidas, muchos de nosotros hemos tenido que trabajar muchas horas, pero tenemos un regulador interno que nos dice cuándo parar. El adicto al trabajo, en cambio, se siente privado de felicidad sin esa actividad constante”, explica Fassel.¿Cómo hacer para curarse?Según Porter, es difícil que el adicto se curse sin ayuda externa. “Puede necesitar ayuda profesional o el apoyo activo de familiares y amigos”, explica y agrega que si no se produce un cambio en el lugar del trabajo, las exigencias y el ritmo de trabajo no bajarán. “Quizás deba pedir un cambio de responsabilidades o una transferencia dentro de la compañía”, finaliza Porter.
