ARGENTINA-. ( AGENCIALAVOZ ) La soledad y la falta de cariño se vuelve cada vez más normal en una época en que el individualismo prima por sobre todas las emociones. Por eso, un grupo de artistas se propuso paliar la falta de afecto y salió a la calle a dar abrazos gratis a quienes lo deseen sumándose así a la movida global del "free hugs".Como muchos en el mundo
Elio Kohaj se paró en una esquina de la ciudad, Corrientes y Uruguay, con un cartel que decía “Abrazo gratis” dispuesto a cumplir con lo que su letrero indicaba. “Es como un ejercicio de arte. Es un abrazo. Y es necesario. Nací en el 59 y viví mi adolescencia en la decada del 70. En ese entonces creí que se podía cambiar al mundo. Después me di cuenta de que no. Hoy no puedo vivir sin creer que tengo que hacer algo” , contó Kohaj a minutuno.com.La idea no se le ocurrió a él, sino que pertenece a un hombre llamado Juan Man. “Un autraliano estaba muy deprimido y en una fiesta alguien le dio un abrazo que lo hizo sentir muy bien. Entonces, comenzó con esta movida de dar abrazos gratis que se hizo popular a través de Internet y que nosotros tomamos”, contó Kohaj. “Formamos parte de un centro de arte y buscando una imagen de un abrazo para la revista que hacemos dimos con un video de abrazos de la web ¨free hugs¨. Nos causó tal emoción que decidimos llevar a la practica los abrazos”, contó su colega Paola Hornak. Y agregó: “Somos actores, cantantes y directores de arte. Nuestro trabajo es conectarnos con la emoción. Había que hacerlo”. No obstante, no mucha gente se muestra receptiva a semejante acto de cariño. “Se engancha poca gente. Preguntan por qué lo hacemos, si nos tienen que dar plata o si les vamos a robar la billetera. La gente no puede creer que es una actividad sin ningún fin de lucro ni beneficio más que el abrazo”, manifestó Paola. Y a la vista está ya que mientras un transeúnte disparó un “¿Que hacen estos locos?”. Otros, no desperdiciaron la oportunidad para recibir afecto.“Toda la gente está sola y la ganacia es el abrazo”, expresó un beneficiado. “¿Me abrazas?”, preguntó otro hombre al pasar. Fundamentó su pedido en que “hay que aprovechar el cariño gratuito”. Mas lejos, una mujer emocionada le contó a un alguien del otro lado de su celular que la abrazaron. “Me parece muy original. Falta afecto. Es un placer que suceda esto en una ciudad como esta”, alegó otra mujer que había recibido un abrazo. Aquel que se perdió del abrazo tendrá otra oportunidad el 17 a las 16.30 en el Obelisco.