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ECUADOR-. ( AGENCIALAVOZ.COM ) La iglesia evangélica buscará en el 2008 fortalecer su imagen frente al pueblo del Ecuador. Sus representantes están convencidos que es hora de buscar la unidad de la comunidad cristiana para participar con entes activos en las decisiones que toman los gobiernos de turno y consolidar el rol que cumplen dentro de la sociedad.
La Iglesia cristiana durante el 2007 enfrentó varias denuncias que intentaron deteriorar su trayectoria en el Ecuador.Alejandro Quinteros… Presidente Cuerpo de Pastores Quito dijo que se presentarán como una “Iglesia seria, responsable, respetable, que está trabajando que se preocupa de la sociedad”.Esto debido a que en el 2007 se presentó varios desaciertos que causaron un sacudón a la comunidad cristiana. La muerte de dos niños por asfixia, en el cual se denunció una supuesta negligencia de predicadores evangélicos llevo a los medios de comunicación a calificar a la iglesia como secta fanática.“Durante quince días tuvimos a los medios de comunicación en un escándalo que de alguna manera se trata de desvirtuar la imagen de la iglesia cristiana evangélica del país” dijo Quinteros.Estos hechos, que fueron aclarados en el momento oportuno, obligó a las autoridades a trabaja en base a parámetros que permitan consolidar la imagen de la iglesia cristiana.“Nuestro espíritu protestante nos lleva siempre ha buscar aun en medio de situaciones mejores a buscar la excelencia” dijo Nelson Castro, presidente Confraternidad Evangélica Ecuatoriana.En este sentido, se han planteado varios ejes programáticos que buscan la unidad de la iglesia a partir de 2008. Quintero, enfatiza que “ser aquellos que construyen la realidad que vive la Iglesia como una bendición, como una estructura también que ayuda al desarrollo y progreso del país”.Su responsabilidad con el estado frente a la nueva constitución. “Estamos buscando que la constitución, sea algo que permita la equidad, que tengamos la posibilidad de progresar” dijo Castro.El aporte del pueblo cristiano en el Ecuador ha sido de gran ayuda a la sociedad y al estado, así lo reconocen sus lideres, por ello su compromiso con la comunidad y los gobiernos de turno. “Somos participantes activos del desarrollo de la nación y no solo con palabras, con nuestro trabajo, con la mística, con el amor que Dios ha puesto en nuestros corazones”, enfatizó Quinteros.
