INGLATERRA-. ( AGENCIALAVOZ.COM ) Las Sociedades Bíblicas ahora podrán saber qué Escrituras están disponibles para los niños ciegos, o en cuántos idiomas hay una Biblia completa en Braille. Esta información, y mucha más sobre los materiales para los discapacitados visuales, está ahora disponible por medio de una nueva base de datos recopilada.
La base de datos es una herramienta útil que permite a las Sociedades Bíblicas que desean servir al público visualmente discapacitado buscar este tipo de Escrituras —ya sean en Braille, letra gigante o versiones especiales en audio— y calcular el costo de estas publicaciones durante el proceso de planificación del presupuesto.
También es un recurso de información para recaudadores de fondos y donantes, ya que ofrece una idea general sobre la amplia variedad de los programas de Escrituras para los discapacitados visuales y de los formatos de productos que las SBU han desarrollado durante la última década para el público visualmente discapacitado.
Aunque la base de datos refleja el impresionante aumento de programas para los visualmente discapacitados en el trabajo de las Sociedades Bíblicas durante los últimos años, también revela que la brecha entre las Escrituras para el público visualmente discapacitado y las Escrituras para el público con vista normal es todavía enorme, y que aún queda mucho por hacer. Al poder ver los buenos ejemplos del compromiso de la Fraternidad en el área del trabajo con los visualmente discapacitados, todas las Sociedades Bíblicas serán estimuladas a considerar las necesidades de este tipo de público especial y las incluirán en su ministerio mediante el desarrollo de programas adecuados.
Las SBU publicaron en 1992 otro tipo de «base de datos» con información sobre los proyectos de Escrituras en Braille en forma de manual impreso. El concepto era diferente en aquellos días: el manual incluía solo publicaciones bíblicas en Braille, ya que el enfoque era hacer que la Biblia estuviera disponible en Braille para los ciegos.
Otra meta de este recurso de información anterior era evitar la duplicación del trabajo entre los productores, ya que en aquellos tiempos todas las Escrituras en Braille todavía se imprimían desde una lámina de metal estampada en relieve. La fabricación de láminas de metal hacía que la producción en Braille fuera muy costosa, y era vital para las agencias y los productores que trabajaban para los discapacitados visuales que se les informara sobre el trabajo que ya se había planificado o que estaba en proceso en otros lugares.
Una primera consulta de las SBU sobre las necesidades bíblicas de los visualmente discapacitados (Chipre 1997), además de las directrices de las Asambleas Mundiales de Midrand y Newport, confirmaron la necesidad de desarrollar más programas bíblicos basados en el público y de aumentar la variedad de formatos adecuados para este tipo de público especial. Gracias a la revolución electrónica que trajo grandes cambios para la tecnología del Braille y de la letra gigante y para la producción de Escrituras, los esfuerzos pudieron multiplicarse. Ahora era el momento para hacer que los resultados del compromiso de las Sociedades Bíblicas fueran visibles en una base de datos con un concepto totalmente nuevo. Aunque el anterior recurso de información había sido útil para los productores, el nuevo está claramente diseñado como una herramienta para las Sociedades Bíblicas.
Nuestra experiencia en los últimos años demuestra que los programas para los visualmente discapacitados son atractivos para los donantes. Existen historias conmovedoras detrás de una Porción bíblica en Braille, un calendario con versículos en Braille en hindi, un boletín de ministerio deportivo para los niños filipinos visualmente discapacitados, una historieta bíblica para los niños ciegos en Egipto, una Biblia en audio para los visualmente discapacitados en Burkina Faso o en la India, o la versión intercalada impresa y en Braille de la serie de boletines Palabras de sabiduría. Poder leer o escuchar la Palabra de Dios cuando perteneces a un grupo altamente marginado como el de los visualmente discapacitados, es todavía un privilegio en muchas partes del mundo. Pero el privilegio más grande, como los expresan muchas personas visualmente discapacitadas, es saber del amor que Dios siente por ellas. El mensaje del Evangelio cambia sus vidas.
Incluso con la ayuda de una base de datos de Escrituras, los programas para los visualmente discapacitados son siempre costosos y desafiantes. Una Biblia normal en Braille todavía consiste de unos cuarenta volúmenes grandes, que cuestan unas cincuenta veces más que una Biblia impresa. Una Biblia en letra gigante todavía ocupa veinte volúmenes, y los ficheros en audio también tienen que reformatearse electrónicamente en un proceso muy laborioso. Además, las Sociedades Bíblicas a menudo necesitan el consejo y la ayuda de una agencia local de discapacitados visuales para poder alcanzar a este tipo de público, y la oportunidad de recibir cualquier ingreso de esta costosa provisión de Escrituras es extremadamente limitada, ya que la pobreza y la ceguera van muy unidas. La base de datos no cambiará estos hechos. Pero el mensaje del Evangelio puede cambiar toda la vida de una persona visualmente discapacitada.