ITALIA (AGENCIALAVOZ).- El Papa pidió ayer perdón por las persecuciones realizadas por fieles católicos contra evangélicos e instó a acabar con el uso de la palabra "secta" para referirse a las iglesias protestantes.
Francisco viajó la mañana de este lunes a la ciudad italiana de Caserta, centro-sur del país, donde cumplió una visita privada a la Iglesia Evangélica de la Reconciliación, guiada por el pastor Giovanni Traettino, amigo suyo desde sus tiempos de arzobispo de Buenos Aires.
"Entre los que persiguieron y denunciaron a los pentecostales, casi como si fueran locos que arruinan la raza, había también católicos: yo soy el pastor de los católicos y les pido perdón por esos hermanos y hermanas católicos que no entendieron y fueron tentados por el diablo", sostuvo.
Aunque la visita fue privada y estrictamente personal, al grado que los periodistas no pudieron ingresar al recinto donde el pontífice se reunió con unos 350 evangélicos, se supieron algunas de las palabras del Papa.