Los satanistas pretenden ser la piedra en el zapato de los congresistas cristianos pro vida pro familia, además de atraer atención hacia las causas de derechos civiles |
EE.UU.-(AGENCIALAVOZ) El Templo de Satán se
ha hecho lugar en los titulares gracias a temas concernientes a la libertad de culto en Estados
Unidos, sobre todo en lo que tiene que ver con exenciones fiscales,
proselitismo de grupos cristianos y de derecha que desobedecen las leyes
o que se benefician abiertamente de ellas.
En esta ocasión se dedicó a
propagar el caso de “Mary”, quien vive en una región de Missouri que
está lejos de la clínica local de abortos. Su problema fue que llevó el
dinero para hacerse el procedimiento pero, debido a la ley que impone 72 horas de espera antes de practicárselo, tuvo que regresar a su casa.
Según ella, los gastos de transporte
sumaron $800 USD, mismos que el Templo de Satán aportó alegremente, a la
vez que denunció la ley de las 72 horas como una artimaña legal con
fines moralinos que afecta a los más necesitados.
El plan ahora es presentar una carta
donde se demande a la clínica hacer una excepción en el caso de “Mary”
ya que, como satanista, ella cree que el período de espera impone “una
carga sustancial a mis creencias religiosas sinceramente albergadas”.
La clínica, por otra parte, no es
culpable de las leyes vigentes sobre el tiempo de espera, pero la
estrategia del Templo de Satán se trata más bien de llamar la atención y
hacer propaganda acerca de las restricciones que enfrentan las mujeres
que esperan hacerse un aborto. Después de todo, la negación de servicios
médicos con base en creencias religiosas es ilegal.