ESPAÑA-.(AGENCIALAVOZ) La organización de caridad Amnistía Internacional ha aprobado una política controversial, apoyando la despenalización del comercio sexual y la prostitución, además de la despenalización de la compra de sexo.
Con un voto de 500 delegados de todo el mundo, la organización aprobó la resolución este martes durante el Encuentro Internacional del Consejo (ICM, por sus siglas en inglés), el cual se lleva a cabo en Dublin, Irlanda, país cuyo gobierno contradictoriamente tiene planes para penalizar el comercio sexual, de la misma forma que lo han hecho algunos países nórdicos, incluyendo Suecia.
El voto significa que el ICM hace un llamado a la junta directiva de Amnistía Internacional para que “adopte una política que busque lograr la protección más alta para los derechos humanos de trabajadores sexuales, por medio de medidas que incluyan la despenalización del trabajo sexual.”
El ICM se encarga de discutir todos los aspectos de estrategia, políticas y presupuesto para la organización a ser utilizados durante los próximos cuatro años, de acuerdo con el medio irlandés The Irish Times.
En un comunicado, Amnistía Internacional dijo que la resolución fue el resultado de “hallazgos tras dos años de consultaciones,” las cuales fueron llevadas a cabo con individuos y grupos que representan a sobrevivientes de la prostitución, feministas y otros representantes de derechos de mujeres.
“Esta es la mejor forma de defender los derechos de los trabajadores sexuales,” indicó el comunicado
Sahil Shetty, secretario general de Amnistía Internacional, dijo que la prostitución “es un asunto complicado de derechos humanos...Trabajadores seuales son uno de los grupos más marginados, y son quienes en mayores instancias enfrentan riesgos de discriminación, violencia y abuso.”
La nueva política de Amnistía Internacional también llama a que países se aseguren de que trabajadores sexuales disfruten de protecciones legales igualitarias en contra de la explotación, el tráfico sexual y la violencia.
Proponentes de la medida en Irlanda para penalizar el comercio sexual han dicho que es una forma de reducir el daño causado a las mujeres que son obligadas a ser parte del mundo de la prostitución.
Sin embargo, críticos de la ley, han dicho que falla en reconocer la posición de aquellas personas que se dedican a la prostitución, ya sea por razones económicas o por elección.
Desde un punto de vista cristiano, la Biblia condena la prostitución y todo acto sexual fuera del matrimonio.