La enmienda que se votaba tenía como objetivo tumbar una disposición aprobada el día anterior que protege la libertad religiosa de las organizaciones, asociaciones e instituciones religiosas que reciben contratos federales para que no puedan ser objeto de discriminación por motivos de su fe.
Según los demócratas esta consideración podría permitir la discriminación contra la comunidad LGTBI en nombre de la libertad religiosa. La enmienda de Maloney hubiera prohibido específicamente los fondos para ejecutar contratos con cualquier empresa que no cumpla con la orden ejecutiva del presidente de EEUU, Barack Obama, que prohíbe a los contratistas federales discriminar a los trabajadores LGTBI.
Inicialmente, el texto contaba con 217 votos a favor por 206 votos en contra, pero acabó siendo desechada por 212 frente a 213, después de que el liderazgo conservador presionara a sus miembros díscolos para que cambiasen de parecer, informa EFE.
“Este es uno de los episodios más feos que he visto en mis más de tres años como miembro de esta Cámara”, dijo el legislador demócrata impulsor de la medida, Sean Patrick Maloney.