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Cisjordania-. ( AGENCIALAVOZ.COM ) Un muchacho de 15 años está gravemente herido luego de que le entregaran un paquete con apariencia de regalo, pero que en realidad contenía una potente bomba.
Cuando el joven Ami Oritz lo abrió, se produjo una explosión que estuvo a punto de costarle la vida, y que le dejará secuelas para siempre. El joven sigue hospitalizado.
La familia Oritz vive en el asentamiento de Ariel, en la Cisjordania ocupada, pertenece a los llamados judíos mesiánicos, que suman unos 15.000 en Israel. La vida de quienes creen que Jesús (Yeshúa) es el Mesías es muy dura en Israel y sus miembros tienen que ocultar su confesión para evitar represalias de todo tipo, lo que muestra la ferocidad religiosa que existe en este país.
Los judíos mesiánicos se consideran judíos puesto que nacieron en esa confesión y celebran todos los ritos y festividades del judaísmo. Sin embargo, se diferencian del resto en que consideran que Jesús (ó Yeshúa, como ellos le llaman) es el Mesías y que el Nuevo Testamento es la culminación del Antiguo Testamento.
Los judíos los consideran cristianos y aseguran que constituyen un grave peligro para el judaísmo. Lo que más molesta a los judíos no mesiánicos es el carácter evangelista del movimiento, es decir, su predicación, su intención declarada de llegar a todos los judíos del mundo para anunciarles que Jesús es el Mesías que durante siglos esperó el pueblo hebreo.
Ahora la Policía investiga el ataque contra la familia Oritz y tiene en la mira a los judíos que persiguen mesiánicos, pero de momento no se han practicado detenciones. David Oritz aseguró que su hijo ya no está en peligro de muerte, aunque los médicos están luchando para que no pierda los brazos y las piernas.
MINISTERIO ORACION INTERNACIONAL
Oremos por Ami Oritz por su salud y fortaleza en el Señor
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