responsables de prevención reconocen por primera vez que el preservativo no es suficiente para prevenir el contagio del Sida, y que el sexo anal hace más probable el contagio. |
“El preservativo ya no es suficiente. En grupos más expuestos hay que complementarlo añadiendo otras formas de prevención”, explicó el director de BCN Checkpoint, Ferran Pujol. Cada año se diagnostican unos 700 casos en Cataluña y los expertos recomiendan al colectivo gay que se hagan pruebas de VIH cada tres meses para reducir el aumento de nuevas infecciones entre los homosexuales.
Pujol mostró su “preocupación e inquietud” por la incidencia de la enfermedad, que “cada año está más concentrada en el mismo grupo poblacional”. El director de BCN Checkpoint insistió, además, en que “hay que intervenir apelando a la responsabilidad de las personas, pero también incrementando las pruebas diagnósticas y facilitando su acceso a ellas desde la atención primaria”.
Pujol negó que la alta incidencia responda a “conductas de mayor riesgo”, sino que lo achacó “a razones biológicas”, ya que el contagio es más probable con el sexo anal, y a que “entre sus posibles parejas sexuales, el virus está más extendido”. Los expertos aseguran que las primeras semanas después de adquirir el VIH, la carga viral es más alta y hay más probabilidad de contagio.
Pujol denunció, por otra parte, “la interlocución casi nula con la Administración central” para afrontar el problema y criticó que no haya ningún grupo de trabajo integral estudiando medidas para abordar la situación. Según los informes que maneja BCN Checkpoint, “en 10 años podríamos encontrarnos con una alarmante situación en la que más del 40% de los homosexuales en la franja de edad de 40 a 50 años vivirían con el VIH”.