Jose Linares Cerón
https://twitter.com/pastorlinares
PERU.-(AGENCIALAVOZ) Los medios de comunicación que defienden a los homosexuales están cada día más agresivas contra los heterosexuales, y sin embargo a ellos nadie los acusa de abuso, hostilidad, difamación, intolerancia e incluso amenazas de muerte. Los medios de comunicación y los ciudadanos tenemos un privilegio constitucional “el derecho a libertad de expresión”.
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PERU.-(AGENCIALAVOZ) Los medios de comunicación que defienden a los homosexuales están cada día más agresivas contra los heterosexuales, y sin embargo a ellos nadie los acusa de abuso, hostilidad, difamación, intolerancia e incluso amenazas de muerte. Los medios de comunicación y los ciudadanos tenemos un privilegio constitucional “el derecho a libertad de expresión”.
La prensa es quien más se ampara con ese derecho constitucional, han
cometido EXCESOS y abusos para convertir en denuncias como si fueran
hechos condenatorios como si fuera una sentencia firme. Han convertido
en rumores como si fuera un hecho delictivo con el único fin destruir la
imagen y la credibilidad de un potencial líder político o líder civil.
La mayoría de los medios de comunicación exigen y presionan a las
autoridades, líderes políticos que se aprueben la ley de crímenes de
odio o la discriminación a favor de la orientación sexual y la identidad
de género.
Una ley criminaliza la libertad de expresión, conciencia, de opinión y religiosa, increíblemente son "periodistas" que supuestamente representan la "libertad de expresión" son quienes lo promueven. Su activismo o fanatismo por la ideología de género los ha convertido en dictadores y enemigos de la democracia. En los países que hemos logrado mantener una mayoría pro familia pro vida debemos protestar contra los periodistas heterofóbicos.
Es hora de que los que exigen respeto, nos respeten también. Si seguimos tolerando pasivamente las exigencias absurdas de grupos minoritarios extremistas, no vamos a poder vivir en libertad, somos la gran mayoría de esta nación, un país democrático, y eso quiere decir que la mayoría gobierna, y que podemos expresarnos libremente.
Conclusión
La democracia corre peligro en el mundo, la ideología de género que promueve la unión civil o el matrimonio gay buscan criminalizar la libertad de expresión conciencia, de opinión y religiosa. Debemos protegernos; la única manera es castigar a los medios de comunicación que promueven el lobby gay y el aborto. Es fortalecer el activismo de los consumidores pro familia pro vida a suspender compras de los productos que auspician a un programa periodístico o de farándula. El Poder civil que tenemos puede poner un alto al abuso y la programación TV vulgar que solo destruye los valores históricos de la familia y el respeto.
Una ley criminaliza la libertad de expresión, conciencia, de opinión y religiosa, increíblemente son "periodistas" que supuestamente representan la "libertad de expresión" son quienes lo promueven. Su activismo o fanatismo por la ideología de género los ha convertido en dictadores y enemigos de la democracia. En los países que hemos logrado mantener una mayoría pro familia pro vida debemos protestar contra los periodistas heterofóbicos.
Es hora de que los que exigen respeto, nos respeten también. Si seguimos tolerando pasivamente las exigencias absurdas de grupos minoritarios extremistas, no vamos a poder vivir en libertad, somos la gran mayoría de esta nación, un país democrático, y eso quiere decir que la mayoría gobierna, y que podemos expresarnos libremente.
Conclusión
La democracia corre peligro en el mundo, la ideología de género que promueve la unión civil o el matrimonio gay buscan criminalizar la libertad de expresión conciencia, de opinión y religiosa. Debemos protegernos; la única manera es castigar a los medios de comunicación que promueven el lobby gay y el aborto. Es fortalecer el activismo de los consumidores pro familia pro vida a suspender compras de los productos que auspician a un programa periodístico o de farándula. El Poder civil que tenemos puede poner un alto al abuso y la programación TV vulgar que solo destruye los valores históricos de la familia y el respeto.